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Zonas de bajas emisiones en España: novedades en 2023

Movilidad 20 Jan 2023

La movilidad va a cambiar mucho en España en 2023 con la proliferación de nuevas zonas de bajas emisiones en muchas ciudades, que se sumarán a las actuales. A día de hoy, 20 ciudades han implantado -o van a implantar en breve- sus ZBE: Madrid, Barcelona, Pamplona, L’Hospitalet de Llobregat, Sant Cugat, Cornellà de Llobregat, Pontevedra, Sevilla, Córdoba, Burgos, Talavera de la Reina, Ciudad Real, Algeciras, San Cristóbal de la Laguna, Melilla y los municipios madrileños de Alcobendas, Coslada, Fuenlabrada, Parla y Rivas.

Todos los municipios de más de 50.000 habitantes de España, y aquellas ciudades con más de 20.000 habitantes que superen los niveles máximos de contaminación, están obligados a adoptar Planes de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) que incluyan, entre otros aspectos, Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Son cerca de 150 ciudades en todo el territorio nacional que cambiarán la forma en la que los coches acceden a sus centros urbanos para cumplir la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética. Esta ley sigue los criterios de los Acuerdos de París de 2015, que establecieron que las ciudades europeas de más de 50.000 habitantes tenían que marcar objetivos cuantificables para reducir el efecto de las emisiones contaminantes de los vehículos.

 

¿Qué es una Zona de Bajas Emisiones ZBE?

Se trata de una zona delimitada de la ciudad, normalmente el núcleo central, en la que solo se permite circular a los vehículos menos contaminantes. Estas zonas son activas y pueden ser más o menos restrictivas dependiendo de los niveles de contaminación ambiental registrados ese día.

 

¿Qué coches pueden entrar en las Zonas de Bajas Emisiones ZBE?

Los vehículos con etiqueta Cero Emisiones de la DGT (eléctricos e híbridos enchufables con más de 40 kilómetros de autonomía eléctrica) no tienen ninguna restricción de entrada a las ZBE.  Los vehículos con etiqueta ECO de la DGT (híbridos HEV, híbridos enchufables PHEV con menos de 40 kilómetros de autonomía, híbridos ligeros MHEV y vehículos de GLP o GNC) solo tienen restricciones en los días de mayor contaminación ambiental. Los vehículos con distintivo medioambiental B y C de la DGT (turismos y comerciales ligeras de gasolina matriculados a partir de enero del año 2000, o diésel matriculados o a partir de 2006), solo pueden entrar en las ZBE si luego estacionan en un parking público (siempre y cuando no sea un episodio de alta contaminación), o si son residentes en la zona.

 

¿Cómo afectan a la movilidad corporativa las Zonas de Bajas Emisiones ZBE?

Este nuevo escenario de zonas de bajas emisiones va a suponer restricciones a la movilidad a muchos empleados con vehículos contaminantes (sin etiqueta, o con etiqueta B en episodios de alta contaminación) y también va a ser reto para las flotas de reparto de última milla, que tendrán que orientarse hacia la electrificación.

Si a esto le sumamos que las nuevas leyes también obligan a las empresas a calcular de su huella de carbono, y a elaborar y publicar un plan de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero -en el que la movillidad de sus empleados es una parte importante- llegamos a un escenario en el que la movilidad se convierte en un factor estratégico para muchas empresas. Según loas datos del Arval Mobility Observatory 2021, el 59% de las compañías ya veía la movilidad de todos sus empleados como un factor estratégico y planeaban trazar un plan de movilidad en los próximos tres años, con vehículos más sostenibles y soluciones de carsharing para el desplazamiento de sus empleados, entre otras medidas. Y es que la nueva movilidad pasa de ser solo corporativa a afectar a todos los empleados de una empresa.

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