LA MATRICULACIÓN DE TURISMOS EN EUROPA EN 2020: HISTÓRICA CAÍDA GENERAL, PERO CON UN GRAN AUMENTO DE LOS VEHÍCULOS ELECTRIFICADOS
LA MATRICULACIÓN DE TURISMOS EN EUROPA EN 2020: HISTÓRICA CAÍDA GENERAL, PERO CON UN GRAN AUMENTO DE LOS VEHÍCULOS ELECTRIFICADOS
Por razones obvias, el 2020 no ha sido un buen año para la matriculación de nuevos vehículos en Europa: las plantas de producción, concesionarios y talleres se han visto obligados a cerrar debido al confinamiento y otras restricciones a lo largo del año. Esto ha generado una disminución anual sin precedentes en la demanda de turismos, que ha descendido un 24,3% en Europa (UE+ AELC + RU) de acuerdo con la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA por sus siglas en francés).
En Francia, el mercado ha caído un 25,5%, ¡registrando el volumen anual más bajo desde 1975!
Todos los mercados europeos, excepto Noruega, han registrado caídas de dos dígitos. El mercado español ha experimentado el mayor descenso (un 32,3%), el Reino Unido un derrumbe del 29,4%, Italia del 27,9% y Alemania del 19,1%.
Resulta llamativo que Noruega haya registrado una disminución de solo el 0,7%. En Noruega, la venta del vehículo eléctrico representa el 54,3% del mercado total, debido a su política de exenciones fiscales para vehículos eléctricos y el fuerte gravamen sobre los vehículos de combustión y con el objetivo de terminar con la venta de vehículos diésel y gasolina en 2025.
En 2020 se ha visto la tendencia continuada en Europa del aumento de la electrificación, de hecho, la venta del vehículo eléctrico (EV) aumentó un 107% y para los híbridos enchufables (PHEV) un 210%.
Los incentivos, diseñados para acelerar la acogida del vehículo eléctrico se han implementado en muchos países europeos. No obstante, debido al impacto de la covid-19 en la venta de vehículos, los Gobiernos han introducido paquetes adicionales de estímulos para incitar la demanda. Dependiendo del país, hemos visto ayudas dirigidas para vehículos de combustión con bajas emisiones y/o el aumento de ayudas ya existentes destinados a vehículos electrificados (PHEV o BEV).
A comienzos de 2021, hemos observado obstáculos adicionales: uno de los cuales es la escasez de semiconductores, que ha alterado la producción en la automoción y ha provocado un retraso en la recuperación de la venta de nuevos vehículos. Algunos fabricantes han anunciado el cese temporal de las plantas de producción. Se espera que esta carencia reduzca la producción global en el primer trimestre de más de 670.000 vehículos de acuerdo a IHS Markit.
De hecho, los semiconductores desempeñan un importante papel en la industria de la automoción, la cual continúa aumentando la demanda de la conectividad y el crecimiento de la electrónica, que cuenta con el vehículo eléctrico como un importante usuario.
Superar esta carencia será uno de los mayores retos para los fabricantes, pero no será el único.
Los países europeos son conscientes del riesgo que supone la dependencia de la producción asiática y ya están valorando alternativas, pero, ¿Será Europa capaz de trasladar la suficente producción?
