Cómo colocar la silla de bebé en el coche para evitar riesgos y multas
La silla de coche para bebé es un elemento de seguridad imprescindible. Cada año fallecen en Europa al menos 1.000 niños y otros 80.000 resultan heridos. El 75% de las muertes infantiles y el 90% de los daños graves se podrían haber evitado si esos niños hubieran viajado correctamente, en sillas de bebe para coche correctamente instaladas y utilizadas.
En España es obligatorio que los niños de hasta 135 centímetros de altura viajen siempre con un sistema de retención infantil (silla de bebe para coche) adaptados a su peso y talla. Y hasta los 150 centímetros de altura es recomendable que los menores sigan utilizando SRI homologados a su talla y peso. Como normal general, la silla de bebe para coche debe ir siempre en los asientos traseros.
No llevar instalado un sistema de retención infantil o utilizarlo mal supone una infracción grave, que conlleva una multa de 200 euros y la retirada de 4 puntos del carnet de conducir. Además, los agentes de la autoridad pueden proceder a la inmovilización del vehículo.
Las sillas de coche de bebés y niños se dividen en diferentes grupos, que generan confusión entre los usuarios porque hay dos normativas de forma paralela. La norma ECE R44/04 establece diferentes grupos de sillas en función del peso del niño. La nueva norma i-Size (ECE R129 i-Size), en vigor desde el año 2013, lo hace en función de la altura.
¿Cómo colocar la silla de bebé?
1. Antes de empezar. Aunque parezca obvio, hay que leer detenidamente el manual de instrucciones y seguir todas sus indicaciones.
2. Dónde instalarla. La silla de bebe para coche debe colocarse en los asientos traseros del vehículo. Solo se permite la instalación en el asiento delantero - siempre con el airbag desconectado- si el vehículo no dispone de asientos traseros, si todos los asientos traseros están ocupados por otros niños en sillas de retención o si no es posible instalarla en los asientos traseros. Siempre es preferible instalarla en el asiento central de la parte trasera, ya que es el lugar más seguro en caso de impacto lateral.
3. Orientación de la silla. Siempre es más seguro que los bebés y niños vayan en sentido contrario a la marcha y que lo hagan el mayor tiempo posible, incluso aunque el niño no pueda sentarse con las piernas totalmente estiradas, pues su seguridad no se ve afectada por ello. La Academia Americana de Pediatria (AAP) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo recomiendan hasta los cuatro años de edad.
Esta orientación resultará clave en una posible colisión, ya sea frontal, lateral o de alcance, porque la fuerza del impacto queda repartida de manera más uniforme por todo el cuerpo del bebé y en el caso del impacto frontal, el cuello sufre mucho menos. La norma R-129 (i-Size) obliga a que todos los sistemas de retención infantil vayan en sentido contrario a la marcha hasta los 15 meses de edad.
4. Sistema de instalación. Hay sillas que pueden anclarse al coche con los cinturones de seguridad de las plazas traseras, otras, a través de los anclajes isofix (unas anillas que forman parte de la carrocería del vehículo y que están entre la banqueta y el respaldo de los asientos traseros); y otras que admiten ambos anclajes. Todos los coches modernos tienen anclajes isofix (generalmente, dos en las plazas traseras), el método más recomendable por su seguridad: al anclase suena un click y el anclaje de la silla se pone en color verde. Si optamos por el cinturón, tiene que estar bien tensado para que la silla quede firmemente anclada: la silla no debe moverse más de 2,5 centímetros en ninguna dirección.
Algunas sillas o bases para sillas disponen de top tether o de una pata de apoyo. El primero es un cinturón que sale de la propia silla de coche para bebé y que se ancla a la parte posterior del respaldo del asiento. La pata de apoyo se apoya en el suelo del coche.
5. No quitar el reposacabezas. Aunque el reposacabezas de las plazas traseras a veces toca con las sillas más grandes de coche para niños, no hay que quitarlo, pues trabaja en conjunto con el sistema de retención infantil para absorber la energía de un impacto.
6. Ángulo de reclinación. Si la silla de bebé permite diferentes ángulos de reclinación, es importante regularlo en uno seguro y que mantenga la cabeza del bebé siempre protegida y sin caer hacia adelante mientras duerme.